La celebración del año nuevo andino amazónico 5532 del Quinto Sol, está lleno de significados para los amawtas de la nación Aymara. Primero por las nubes que no permitieron ver los rayos solares, por otro lado, las nubes rojas que aparecieron en el horizonte.
El Mara t’aqa o año nuevo andino amazónico y del Chaco, tuvo unas características especiales. En la gran mayoría del altiplano, estuvo cubierta de nubes; lo que significa que habrá cierto retraso en los planes de la sociedad en su conjunto, vale decir que se tendrá aletargamiento al principio, pero después se verá mejoría en general.
Algunos yatiris en su predicción, mostraron su preocupación por los celajes, nubes de color rojo, que se pudo advertir previo a la salida del sol, que después se cubrió de nubes. Este hecho hace pensar o que habrá derramamiento de sangre, puede ser por accidentes, confrontación social o de asonadas golpistas.
El año 2019, previos al golpe de Estado, se pudo apreciar diferentes señales, como el thaparacu o mariposa nocturna, mensajero de la muerte, se posó en el palacio de gobierno en la ciudad de La Paz. El enjambre de moscas que siguieron a militantes del Movimiento al Socialismo en el pleno prado paceño y también se apreció nubes rojas en el firmamento, especialmente en la mañana previo a la las masacres de Sacaba y Senkata.
Las señales para los amawtas aymaras, son claves para predecir el futuro. Hace dos años se pudo percibir al sol con 3 a 4 halos. Cuando el sol tiene un halo, es casi normal, se interpreta que el sol está enfermo y se le tiene que hacer ofrendas de sanación. Cuando el sol aparece con más halos, es señal de preocupación por qué anuncia desastres naturales como sequías, inundaciones, terremotos, ciclones, erupción de volcanes y otras calamidades.
Por: Tata Uriki David Ticona, yatiri amawta, filósofo y teólogo indígena Aymara, abogado y periodista. Fue gestor proyectista de la Universidad Pública de El Alto, 1989 – 2000. Cel. 71539769