CEPABOL, La Paz, Bolivia – 20/08/2025.- Organizaciones y defensores del patrimonio cultural y los derechos de los pueblos indígenas denuncian la presunta destrucción de la wak’a sagrada aymara denominada Salla Uma, ubicada a 150 metros sobre la autopista La Paz-El Alto, por parte de la administración del ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño.
En el mes aniversario del departamento de La Paz, en julio del año 2024, el Gobierno nacional inició la construcción del Parque Lineal Metropolitano que impulsa el desarrollo e integración de las ciudades de La Paz y El Alto, que contará con una longitud de 18,24 km.
En el acto de inicio de obra protocolar participó el Presidente Constitucional de Bolivia, Luis Arce, el ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Edgar Montaño, el viceministro de Transporte, Enrique Ponce de León, autoridades municipales y representantes de diferentes sectores.
Este proyecto, si bien es de mucho beneficio para la población de las ciudades de La Paz, y El Alto, destruye un lugar sagrado de la nación milenaria aymara, la Huak´a «Salla Uma» traducido al español significa agua de peñasco escarpado y con un tono musical melódico. Es una deidad destinada a personas que se dedican a la música, lugar donde se pedían permiso a los achachilas para que se pueda «encantar» los instrumentos musicales,
EL amawta Uriki David Ticona, denuncio que “este acto es calificado como una grave afrenta a la cosmovisión y espiritualidad de la nación aymara, evocando prácticas de la época colonial al tratar sin respeto ni consideración a una wak´a sagrada y a la representación de la diosa de la nación kallawaya, denominada «Mama K’oa”, diosa de las ofrendas ceremoniales.
«Vamos a interponer una Acción Popular, exigiremos que se suspenda los trabajos en ese lugar sagrado y que se restituya el uso exclusivo de la wa´ka que es el de lugar de adoración de los dioses tutelares aymaras. Queremos garantizar los derechos e intereses colectivos de la nación aymara que es el derecho a expresar libremente nuestra espiritualidad milenaria y ancestral» concluyo Ticona.
El sitio, que históricamente ha servido como un punto de conexión espiritual y cultural entre las ciudades de El Alto y La Paz, es un lugar de profunda significación para las comunidades indígenas. Su destrucción no solo representa una pérdida material, sino un atentado contra la identidad cultural y las creencias religiosas de los pueblos originarios, derechos que se encuentran protegidos por la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia.
Un Legado de Reconocimiento y Espiritualidad Ignorado
Es fundamental recordar que este lugar sagrado no es un espacio desconocido o sin reconocimiento. Según la Agencia de Noticias Fides, el 28 de noviembre de 2004, el entonces alcalde de la ciudad de La Paz, Juan del Granado, inauguró el Mirador de Salla Umani. Este acto oficial reconoció el sitio como un «espacio de práctica espiritual de los Amawtas» y, por ende, un «lugar sagrado (huaka) al ingreso de La Paz».
En aquel momento, la Dirección de Turismo habilitó este mirador con la conclusión de su primera fase, dándole la forma de un templo andino, con una ventana equinoccial, un altar koricancha y un empedrado para facilitar el acceso a los visitantes. En este sitio, los amautas practicaban terapias de religiosidad andina, realizando ceremonias con plantas medicinales y adivinando la suerte de los interesados en mesas instaladas a lo largo del mirador.
El exalcalde Juan del Granado enfatizó la importancia de estos espacios al señalar que «la ciudad no solo comprende las casas, calles, construcciones, cemento, sino también es el alma, es el ajayu, son nuestros antepasados, nuestros achachilas, nuestra historia. La Paz, al igual que un árbol con raíces, tiene las raíces más profundas en nuestras culturas y pueblos originarios, estas creencias que nos permitió vivir aquí hace miles de años».
Violación de Derechos Constitucionales y Precedentes Legales
La acción de destruir la wak’a Salla Uma contraviene directamente lo establecido en la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, que en su Artículo 30, Parágrafo II, numeral 7, garantiza a las naciones y pueblos indígena originario campesinos el derecho «A la protección de sus lugares sagrados»
Asimismo, el Tribunal Constitucional Plurinacional ha reiterado la importancia de la relación de los pueblos indígenas con su territorio y sus sitios sagrados. La Sentencia Constitucional Plurinacional 0014/2013-L del 20 de febrero de 2013, subraya que «para las comunidades indígenas la relación con la tierra no es meramente una cuestión de posesión y producción sino un elemento material y espiritual del que deben gozar plenamente, inclusive para preservar su legado cultural y transmitirlo a las generaciones futuras». Esta sentencia refuerza la protección de los lugares sagrados como parte integral de la identidad cultural y la cosmovisión indígena.
La destrucción de Salla Uma no solo ignora un precedente de reconocimiento municipal, sino que también vulnera derechos fundamentales consagrados en la Carta Magna y desarrollados por la jurisprudencia constitucional boliviana.
Se exige a las autoridades competentes una explicación y la adopción de medidas urgentes para reparar el daño causado y garantizar el respeto irrestricto a los derechos culturales y espirituales de las naciones y pueblos indígenas de Bolivia.
Referencias: 715 39 769

Destrucción de un lugar sagrado trato denigrante a una deidad aymara Antes de la destrucción de la wak´a sagrada Antes de la destrucción de la wak´a sagrada Antes de la destrucción de la wak´a sagrada