El Alto, 06 de noviembre de 2024. – En un acto simbólico frente a su domicilio en la ciudad de El Alto, Leopoldo Chui, asambleísta departamental y líder de la agrupación Jallalla, anunció su candidatura presidencial para el periodo 2025-2030, mientras cumple arresto domiciliario en un proceso promovido por el gobernador de La Paz, Santos Quispe. Vestido con uniforme de preso y enmanillado, Chui se presentó ante los medios en una tarima decorada con un banner que proclamaba su candidatura, acompañado por un grupo de personas de distintas comunidades.
En su discurso, Chui señaló que su nuevo partido, Jach’a Uru, es una respuesta a las “injusticias” y a la “necesidad de representación” que enfrenta el pueblo boliviano. «Este nuevo partido político nace de nuestras raíces y cultura«, enfatizó, en un intento por posicionarse como un referente de los movimientos sociales y originarios en el país.
Contexto de la Fractura Política
Chui, quien ha sido una figura prominente en Jallalla, respaldó en el pasado a figuras como Eva Copa y Felipe Quispe, “El Mallku”. Tras el fallecimiento de Quispe, su hijo Santos asumió la gobernación de La Paz con el apoyo de Jallalla. Sin embargo, la relación entre Chui y Santos Quispe se deterioró después de las elecciones subnacionales, dando paso a una serie de conflictos y acusaciones públicas entre ambos.
El quiebre político llegó al punto de que Chui denunció a Quispe por presunta corrupción y falta de transparencia en la gestión departamental. Por su parte, Quispe respondió promoviendo un proceso judicial en contra de Chui, bajo acusaciones de cobros ilegales en la elaboración de listas para candidatos de Jallalla en las elecciones subnacionales.
La aparición de Chui con uniforme de preso es vista como una estrategia de reivindicación en la que busca mostrarse como víctima de persecución política, a la vez que presenta su candidatura para las elecciones presidenciales de 2025 con un nuevo movimiento que promete ser “nacional y con base cultural”.