El Alto, 08 de agosto de 2024. – La ciudad de El Alto celebra una de sus más queridas tradiciones con la inauguración de la Feria de Artesanías en Arcilla y Yeso en el barrio de Alto Lima. Este evento anual, que se ha convertido en un pilar de la cultura local, reúne a decenas de artesanos que exponen y venden una variedad de productos hechos a mano, desde el clásico ñiq’i phukhu hasta miniaturas detalladas de llamitas, vaquitas, alcancías, canastas, y mucho más.
La feria se lleva a cabo en la Avenida 5 de Agosto, entre la Calle Sucre y la Avenida Adrián Castillo, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de apreciar y adquirir estas únicas creaciones artísticas. Esta muestra no solo es un escaparate del talento y la creatividad de los artesanos de El Alto, sino también un importante motor económico para la comunidad local.
Los artesanos han trabajado incansablemente para preparar sus productos para este evento, que atrae tanto a residentes como a turistas que desean llevarse a casa un pedazo de la rica cultura boliviana. Desde piezas tradicionales que han sido transmitidas de generación en generación, hasta innovadores diseños contemporáneos, la feria ofrece algo para todos los gustos y presupuestos.
Este año, los organizadores han hecho un esfuerzo especial para garantizar un ambiente seguro y acogedor, con medidas sanitarias adecuadas para proteger tanto a los expositores como a los visitantes. La feria es también una plataforma importante para el intercambio cultural, donde los artesanos pueden compartir sus técnicas y conocimientos con el público.
Se invita a todos aquellos que se encuentren cerca a pasar por la feria, disfrutar del ambiente vibrante y apoyar a los artesanos locales comprando sus productos. Este apoyo es fundamental para mantener viva esta tradición y garantizar la sostenibilidad de las familias que dependen de la venta de sus artesanías.
La feria estará abierta al público durante toda la semana, y los organizadores esperan una gran afluencia de visitantes que puedan llevarse no solo un recuerdo físico, sino también una experiencia cultural enriquecedora.