25 de abril de 2024. – La muerte de Juan Carlos Montenegro, exgerente de Yacimientos de Litio Boliviano (YLB), ha dejado una serie de interrogantes y controversias. Según reveló su abogada, Audalia Zurita, Montenegro envió una carta póstuma a través de WhatsApp minutos antes de fallecer por un presunto infarto cardiaco. La carta, que contiene menciones sobre su investigación por el caso de las piscinas de carbonato de litio, ha desatado un debate sobre las circunstancias exactas de su muerte.
La Fiscalía anunció que realizará un examen toxicológico a las muestras de Montenegro para determinar si había sustancias en su cuerpo que pudieran haber contribuido a su deceso. Además, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) llevará a cabo un peritaje documentológico sobre la carta póstuma para verificar su autenticidad y la firma del exgerente. Este hecho ha suscitado un intenso debate público y críticas hacia el gobierno de Luis Arce, especialmente desde sectores vinculados al evismo.
La carta póstuma de Montenegro denuncia supuestos intentos de incriminación y persecución política por parte del gobierno actual, así como la presunta negligencia en el proyecto de industrialización del litio en Bolivia. Su fallecimiento ha sido lamentado por figuras políticas como Teresa Morales, exministra de Evo Morales, quien ha acusado al gobierno de Arce de ser responsable de su muerte. Estos acontecimientos arrojan luces sobre un caso que continúa generando controversia y cuestionamientos sobre la gestión estatal del litio en el país.